La Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres invirtió $773.749.969, para rehabilitar la bocatoma del acueducto de Campoalegre, destruido por creciente del afluente abastecedor, acaecida en febrero pasado.
La millonaria inversión normaliza el suministro de agua potable a los habitantes de La Capital Arrocera del Huila y se convierte en la primera intervención estatal, para atender los efectos de una emergencia, producto del invierno, pues es característico que la acción oficial demore muchos años en llegar o no llegue.
Falta ahora conocer la definición de políticas de atención y manejo que tanto la Administración local (Alcalde y Concejo) con la CAM, ejecuten sobre la cuenca hídrica que provee del agua para el abastecimiento de los habitante de Campoalegre, porque esa falta de definiciones genera riesgo constante de destrucción de la bocatoma, por otra infortunada avenida de la fuente hídrica.